La inspección de las fachadas de edificios, es eminentemente cualitativa que, por comparación, detecta situaciones que pueden ser consideradas como anómalas y que, una vez analizada la documentación existente y las características particulares de cada una de las áreas citadas, puede generar la información que permita detectar irregularidades en las condiciones de aislamiento de la fachada.
Aunque hay muchos factores que determinan la eficiencia energética de los edificios, sin duda uno de los más destacados es la composición de fachadas y cubierta. El consumo en climatización depende en gran medida de las infiltraciones, los puentes térmicos o el estado del aislamiento. Un edificio mal aislado necesitará mucha más energía para mantener la temperatura interior que otra con un adecuado aislamiento. En estos casos se produce un gran derroche en forma de pérdida de energía de manera ineficiente, y por ende, un gran derroche económico.
METODOLOGÍA DEL ENSAYO
Una puerta ventilador es un ventilador de gran alcance que se monta en el marco de una puerta exterior. El ventilador empuja el aire fuera del edificio ó vivienda, reduciendo la presión del aire en el interior y provocando que fluye a través de todas las grietas y aberturas no selladas.
Los datos de la puerta del soplador calibradas permiten que el auditor pueda cuantificar la cantidad de fugas de aire y la eficacia de cualquier trabajo de sellado de aire y por tanto valore las pérdidas energéticas del edificio o vivienda debido a las infiltraciones de aire.
Si hay infiltraciones en la envolvente, el aire exterior penetrará a través de las mismas, con lo que se facilita su localización. Para detectar con precisión las infiltraciones se realiza una cuidadosa inspección durante la cual se contará con la ayuda de anemómetros y/o sistemas de termografía infrarroja.
La figura muestra una sección de un edificio que incluye el procedimiento de medición. La BlowerDoor es instalada en la puerta exterior (marcada en rojo). Las flechas azules indican las infiltraciones de aire exterior a través de la envolvente, que pueden ser localizadas generando en el edificio una presión inferior a la presión atmosférica.
Con la BlowerDoor obtenemos el flujo de aire necesario para generar una presión negativa de 50 pascales. Esta presión es equivalente a un viento de grado 5 en la escala de Beaufort.